Es un fenómeno en el que intervienen dos elementos tan comunes como la radiación solar y el magnetismo de la tierra y, sin embargo, fascina a los humanos desde hace milenios. Las auroras boreales son una de esas atracciones de la naturaleza que hay que ver al menos una vez en la vida. En Viajes Orzán te proponemos varios planes para gozar de un espectáculo inolvidable en el extremo norte de Europa.
Svalbard (Noruega)
El mismo nombre de este archipiélago evoca aventuras polares de otra época. El archipiélago más al norte del reino de Noruega es un territorio virgen en el que se puede apreciar el inmenso y a la vez frágil ecosistema ártico. El viaje tiene como base el pintoresco pueblo de Longyearbyen, una inconfundible localidad de casitas de colores en la que viven la mayor parte de los 3.000 habitantes de las islas.
Fin de año en Islandia
Con su combinación extrema de clima polar y geología volcánica, Islandia se ha convertido en uno de los lugares favoritos para quienes gustan del gran norte. Su capital, Reykjavik, es una ciudad cosmopolita en la que se concentra la mayor parte de la población de una isla por lo demás salvaje y por descubrir. Las playas volcánicas de Vik, la costa helada de Ísafjördur, las calles heladas de Akureyri, las cascadas imposibles y las auroras boreales harán del fin de año un acontecimiento único.
Saariselka (Finlandia)
Aunque no se haya estado allí, todo el mundo tiene en mente la imagen ideal de la Laponia finlandesa: grandes mares de nieve surcados por trineos tirados por huskies, renos pastando entre árboles nevados y, por supuesto, la casa en la que vive Papá Noel. Todos estos lugares existen y se pueden visitar, especialmente con niños, aprovechando además para observar el fenómeno natural de las auroras boreales en instalaciones pensadas para disfrutarlas.
Cabañas boreales islandesas
Es imposible disfrutar de la naturaleza islandesa desde más cerca que en esta propuesta, consistente en una semana de hospedaje en granjas o cabañas repartidas por toda la geografía de la isla. Con la libertad de poder conocer este territorio virgen en coche, uno se puede transformar en cazador de auroras boreales y desplazarse por Islandia para conocer sus maravillas naturales, el Círculo de Oro, la península de Snaefellsnes o las pequeñas ciudades del norte.
¿Preparado para una escapada diferente al “gran norte” Europeo? |